Por qué debemos boicotear La Casa de Papel. Por La Falange de Cantabria

Por qué debemos boicotear La Casa de Papel. Por La Falange de Cantabria 
       

Porque la historia se hace de abajo arriba, y la única esperanza de España es la acción popular directa de su gente, de esos que aún tenemos el orgullo de llamarnos pueblo español.

Porque no podemos contar con ninguna de las instituciones del Estado. Desde la primera, hasta la penúltima, que es el pueblo español. Ni la Corona (perdón por las mayúsculas), ni el Gobierno (perdón por el acto de fe) ni los fiscales, ni lo que queda del ejército, moverán un dedo por defender el honor de nuestra querida patria. Y no digamos ya los enemigos de España, chapoteando en su ciénaga de impunidad y miseria moral subvencionada.

Porque no nos vamos a quedar en casa mirando mientras violan a España. No vamos a seguir pagando impuestos a este sistema parasitario que nos esquilma y, a cambio, nos ofrece listas de espera,  una educación de mierda y una televisión pública que patrocina a proetarras. Los del tiro en la nuca. Los del HiperCor de Barcelona. Los de Miguel Ángel Blanco. Recuérdalo.

Porque no nos vamos a tragar su basura. Ni La Casa de Papel, ni sus niñas con pene. Ni sus “realidades nacionales” ni sus escupitajos sobre nuestra sagrada bandera. Ya no. Porque ha llegado la hora.

Porque España es la herencia que recibimos de nuestros padres y la que dejaremos a nuestros hijos, y no hay patria sin dignidad, y no hay dignidad sin defensa del honor.
Porque no queremos que nuestros hijos vean proetarras en la televisión, ni bandas de vagos duchos sólo en el arte de la subvención y la mentira, sino personas educadas y virtuosas que les sirvan de ejemplo.

No en nuestro nombre. No con nuestro dinero. No con nuestro silencio.

Ha vuelto España, y ha vuelto para quedarse. Que huyan sus enemigos.

Y a desempolvar la bandera. Y el orgullo. Y la dignidad.