Bildu, el Tribunal Constitucional y otros demócratas

Esta fue la intervención radiofónica con fecha de 08/05/2011 del Jefe de Información y Prensa del Sindicato Trabajadores Nacional Sindicalistas, Jesús Muñoz, en el programa debate “Sencillamente Radio” de Radio Inter (programa que se emite todos los domingos de 08:30 a 11:30 horas en esa emisora en el 918 de AM de Madrid y en FM para toda España. En Internet: www.radiointer.com o http://www.intereconomia.com/oir-radio-inter). 
Decisión del Tribunal Constitucional sobre Bildu un éxito de la democracia?.

Si este sistema que padecemos en España hace 35 años es una democracia, como no se cansan de repetir todos su voceros que viven, y muy bien por cierto, de este régimen, esta sentencia es perfectamente democrática porque es tan repugnante, injusta y antiespañola como el sistema que la ampara mientras acaba con España. Y no comparto que esta sentencia sea anticonstitucional, ya que por lo menos es tan ambigua, injusta y negativa para España como lo es la propia Constitución. 
Una vez más tenemos que hablar de traición consumada, de negociación permanente con ETA, y de la complicidad de todo el régimen con ETA, porque ETA, se vuelve a demostrar, es piedra angular del sistema. El sistema le debe su vida a ETA y le lleva pagando por ello 40 años, eso sí, pagando con nuestro dinero, nuestro presente, nuestro futuro y nuestra sangre. 
Se habla mucho de que en España no hay separación de poderes y que esta sentencia es consecuencia de ello, y no seré yo quien lo niegue, pero lo que sí niego es que la separación de poderes, tal y como son los poderes en España, y quienes los integran, evitaría estas decisiones injustas y antiespañolas. Y lo voy a hacer con un ejemplo que entenderán hasta los más imbéciles de los que escuchan este programa. Si yo tengo tres kilos de boñigas de vaca, me da igual tenerlos en tres cestos completamente independientes uno de otro, que todas las boñigas juntas en un solo cesto, sin separaciones. En cualquiera de los dos casos tengo lo mismo, un montón de mierda. Y eso es lo que ocurre con los tres poderes, ejecutivo, legislativo y judicial, en España, juntos o por separado los tres poderes son igual de injustos, antiespañoles y traidores, y lo que hay que hacer es cambiar radical y contundentemente las instituciones y las personas que componen estos tres poderes. 
Alguien podría decir que hago mal en generalizar y que hay jueces íntegros, honrados y justos. Estoy seguro de ello, tanto como que estos jueces jamás serán vocales del Tribunal Constitucional ni del Consejo General del Poder Judicial, ni siquiera del Tribunal Supremo, ni de la Audiencia Nacional. Y no lo serán porque esta honestidad les impedirá ascender entre los corruptos y prevaricadores, o bien porque el sistema los manipulará o utilizará para sus objetivos y al final los convertirá en la misma morralla que los más altos magistrados que legalizan y amparan el terrorismo, el separatismo, el delito común y todas las injusticias que se le pongan por delante a sus señorías. 
Y generalizo con los jueces, como lo hago, por los mismos motivos, por ejemplo, con políticos, militares o periodistas, los justos, los honrados, los patriotas, los valientes, jamás llegarán a la cúpula de los partidos políticos, de las fuerzas armadas o de los medios de comunicación, jamás en este sistema. 
Y termino con la que debe ser nuestra respuesta, la del pueblo que conserva dignidad y sentido de la justicia. Ya está convocada por las asociaciones de víctimas una manifestación para el sábado 12 en Madrid, protesta a la que se sumará el Sindicato TNS que critica públicamente esta sentencia porque nos obliga a hacerlo nuestra dignidad y nuestro patriotismo. Otra vez tienen que ser las víctimas de las injusticias las que nos saquen a la calle porque las instituciones, todas las instituciones, las traicionan mientras cometen injusticias. El sábado serán las víctimas del terrorismo y dentro de unas semanas lo hará la Asociación Sandra Palo contra la Ley de Menor. Es evidente que las víctimas están teniendo excesiva paciencia con los asesinos y con todos sus cómplices. 
En una nación relativamente normal, manifestaciones masivas y pacíficas, como las que se producen regularmente en España, contra estas injusticias conseguirían sus objetivos, en España sabemos que no es así. Son muchos los ejemplos y eso hay que cambiarlo y lo tenemos que cambiar, precisamente, los que acudimos a esas manifestaciones. No podemos volver a casa después de acudir a la manifestación del sábado como el que regresa a casa después de acudir al cine o de dar un paseo. Son tantas las injusticias y tan enormes que nuestra respuesta no se pude limitar a lo que se está haciendo hasta ahora. Esta manifestación debe acabar metiendo miedo al sistema y eso no se consigue soltando globos de colores a la finalización de la misma, sino rodeando sedes de instituciones o incumpliendo normas administrativas que hay que incumplir cuando nos jugamos lo que nos jugamos. Nada cambiará si no cambiamos nosotros y nuestra actitud, que hasta ahora no ha servido de nada, reconozcámoslo.